Bienvenidos | ... pasen y lean |
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jueves, diciembre 01, 2005 Hoy, mañana, pasado, reconstruidos tus mil pedazos en persona es hora de comenzar de nuevo la maravillosa tarea de vivir sintiendo y no de sentir vivir. Los lazos se acortaron un milímetro pero pueden crecer un millón. Esperá tu pajarito. Sí, claro porque tuve tantos pajarones... Tengo que hacer cosas, Celia. ¿Qué cosas? Cositas... amar a mis uñas. ¿Amar a tus uñas? ¿Por qué nunca me dijiste que querías amar a tus uñas? Los cafés interminables cómo terminan de golpe sin dar lugar a explicaciones tan importantes, las más importantes, cuando uno necesita tanto domesticar.Ese duende que viene todas las noches a despertarme y que trae una bolsita llena de frases lindas pero incomprensibles ¿quién es? ¿Por qué me desvela convirtiéndose en viento que golpea los cristales de mi ventana? ¿Con qué mano moverá las sombras, con qué boca silbará su legado? ¿Qué será de mí en un rincón del mundo llorando a carcajadas? Reina Roffé
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